CRÍTICA DE CINE: Hacia rutas salvajes
Sean Penn ya ha demostrado con creces que es un gran actor pero su
faceta de director es menos conocida a pesar de haber hecho buenas
películas como su debut, Extraño vínculo de sangre.
En esta demuestra que ha aprendido mucho de los directores con los que ha trabajado ya que está muy bien dirigida aunque resulta demasiado larga, dedica más tiempo del debido a mostrar paisajes y no termina de decidirse entre un tono más documental u otro más de ficción. Además se arriesgó considerablemente al dar el papel protagonista, muy exigente a todos los niveles, a un joven y desconocido actor que está bastante bien aunque a veces el papel le viene un poco grande y sobre todo porque en vez de recurrir a lo fácil, mostrar a Chris como una especie de héroe romántico, se decidió por un enfoque más realista, enseñando sus fallos y contradicciones. De hecho aunque en principio me identifiqué con él al final me acabó cayendo muy mal y llegué a la conclusión de que era un niñato egoísta al que no le importaban los demás (la prueba está en cómo trata al anciano magníficamente interpretado por Hal Holbrook) y que se creía mucho más listo de lo que era. Y por cierto, que el protagonista caiga muy mal no tiene nada que ver con la calidad de la película como parecen pensar algunos críticos.
Una cosa que me gusta mucho de la película es que te hace reflexionar al contrario que la mayoría del cine actual, que parece hecho para tontos.También me gustaron mucho la fotografía que retrata maravillosamente los espectaculares paisajes que recorre Chris, las preciosas canciones del cantante de Pearl Jam Eddie Vedder y el trabajo de todo el reparto.
En esta demuestra que ha aprendido mucho de los directores con los que ha trabajado ya que está muy bien dirigida aunque resulta demasiado larga, dedica más tiempo del debido a mostrar paisajes y no termina de decidirse entre un tono más documental u otro más de ficción. Además se arriesgó considerablemente al dar el papel protagonista, muy exigente a todos los niveles, a un joven y desconocido actor que está bastante bien aunque a veces el papel le viene un poco grande y sobre todo porque en vez de recurrir a lo fácil, mostrar a Chris como una especie de héroe romántico, se decidió por un enfoque más realista, enseñando sus fallos y contradicciones. De hecho aunque en principio me identifiqué con él al final me acabó cayendo muy mal y llegué a la conclusión de que era un niñato egoísta al que no le importaban los demás (la prueba está en cómo trata al anciano magníficamente interpretado por Hal Holbrook) y que se creía mucho más listo de lo que era. Y por cierto, que el protagonista caiga muy mal no tiene nada que ver con la calidad de la película como parecen pensar algunos críticos.
Una cosa que me gusta mucho de la película es que te hace reflexionar al contrario que la mayoría del cine actual, que parece hecho para tontos.También me gustaron mucho la fotografía que retrata maravillosamente los espectaculares paisajes que recorre Chris, las preciosas canciones del cantante de Pearl Jam Eddie Vedder y el trabajo de todo el reparto.
Nota: 7 sobre 10
Lo mejor: la fotografía y la dirección
Lo peor: que el protagonista acaba resultando cargante
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